Un amor arraigado a la tierra.
Cristina y Agustí, una pareja profundamente arraigada y llena de amor por su tierra, decidieron celebrar su gran día en Olot, su pueblo natal. La ceremonia religiosa se celebró en la majestuosa Iglesia del Tura, un lugar cargado de historia que aportó serenidad y solemnidad a su enlace. La celebración continuó en el jardín de Calders, un espacio natural que fue el escenario perfecto para una fiesta llena de alegría y momentos inolvidables.
«¡Qué cosa más bien hecha… estamos muy, muy felices! ¡Sois unos cracks, el vídeo es PERFECTO, qué suerte haberos encontrado!»